Antes y despues. Renovando un estropeado mueble estanteria

Cuando llegó este mueble a mis manos pensé "puff, ¿Y ahora que hago yo con esto?. No lo tenía nada claro en un principio pero al final, con un poco de tiempo, surgió la idea que podéis ver hoy. Al final este viejo y estropeado mueble estantería se ha convertido en un bonito mueble muy funcional, totalmente original y con un aspecto muy actual. 

Este mueble me lo consiguieron unos amigos. Estaban llegando a su casa, lo vieron en la basura y rápidamente me llamaron para ver si me interesaba. Yo dije que si, no muy convencido, y no me pasó eso que en otra ocasiones si me ocurre, no se me ocurrió una idea al instante. Así que esté mueble se tiró bastante tiempo en el almacén esperando su oportunidad. Hasta que un día, después de pensar varias opciones, le llegó el turno.

Creo que el que no se me ocurriera una idea en concreto cuando vi este mueble hizo que madurara en mi mente que podría hacer con el, que pensara mas posibilidades porque en mi primer pensamiento este mueble tendría que haber sido amarillo y con una serie de detalles distintos. Pero si ahora lo pienso, menos mal que no fue así porque esta opción me gusta mucho más, y esta mal que yo lo diga, pero ha quedado genial, es mucho más bonito.

Como no estaba en muy buen estado la pintura que tenia (estaba mal pintado y con muchos desconchones) lo primero que tuve que hacer fue decaparlo. Y menos mal que lo hice porque debajo de la pintura celeste existía otra capa de pintura marrón que incluso estaba peor que la primera. Así que tocó tirar de cepillo y espátula para no dejar ni resto de la pintura. Este es un `paso que hay que hacer con mucho cuidado para no dañar la superficie del mueble y además usar para nosotros mismo las protecciones correctas ya que los decapantes pueden hacernos quemaduras en la piel. Acordaros de esto, protegeros.

Cuando ya estuvo toda la pintura lista le tocó el turno a la imprimación. Simplemente con una capa de esta fue suficiente para que este mueble estantería cambiara de aspecto. Ya parecía otro distinto y el trabajo solo estaba a la mitad. Con la imprimación totalmente seca, esperando el tiempo que marcaba el fabricante, le llegó el turno al color. Y elegí un verde mint porque casi que el mismo mueble me lo sugirió. Viendo el mueble, yo me lo imagino en el piso de una mujer, con muy buen gusta jajaja, o en una habitación infantil lleno de peluches y cuentos. Así que rulo en mano le fue dando las distintas capas. Ya por ultimo le tocó al barniz y con dos capas fue suficiente para conseguir un buen acabado.

Pero claro, veía el mueble y me parecía que estaba soso, le faltaba algún que otro detalle. Así que para solucionar esto recuperé el chapon que cubría antes el mueble y que había desechado. Como tenia un resto de un papel pintado con un motivo de flores muy bonito y que iba a juego con el color, pues cubrí todo el chapon. Y fue totalmente un acierto, pero para mi gusto seguía faltándole algo más.

Y después de pensar... ya lo tenía claro, iba a hacer un cajón para la parte inferior del mueble aprovechando unas maderas de palet que tenia en el taller. Que como podéis ver fue una muy buena idea el incorporar este cajón. Corte las maderas con las medidas que necesitaba para adaptar el cajón al hueco, las lijé para conseguir un tacto suave, las uní y las barnice. ¡Y quedó genial!

Bueno, como podéis ver, de lo que antes era un mueble que parecía que ya no tenia futuro, ha surgido un mueble estantería muy bonito, actual, original y muy funcional. Si te ha gustado mucho este mueble, puede ser tuyo por solo 120 euros. No vas a encontrar otro igual, que sirva tanto para decorar tu salón o tu habitación, e incluso quedaría genial en una habitación infantil. No tardes mucho en decidirte porque es muy probable que te quedes sin el, como ya os pasó a algunos con la ultima mesa que hice.

Y bueno, por mi parte nada más, solo espero que os haya gustado y que este mueble este decorando pronto alguno de vuestros hogares. ¡Ciao!